sábado, 15 de octubre de 2011

Mesoamerica


Este video nos sirve para reafirmar los conocimientos que ya tenemos acerca de Mesoamerica, ya que nos numestra sus caracteristicas sociales, las diferentes culturas y las lenguas que hablaban, los pueblos mas destacados, sus principales actividades, su flora, fauna, su politica,su religion y las  artesanias que elaboraban para los intercambios que hacian con otros pueblos para su sobrevivencia.

MEXICO PREHISPANICO


Este video me parecio muy interesante porque nos muestro algunos de las zonas arqueologicas de algunas culturas que se asentuaron en Mesoamerica, y que en nuestros dias son importantes y valiosas para los seres humanos.

Aqui nos muestran los Atlantes de Tula en la cultura Tolteca.
El tajin en Veracruz, cultura Totonaca
Chalchiuhtlicue que es la señora de la falda de jade (Diosa del agua), cultura Teotihuacana
Juego de pelota en Teotihuacan
Tlatelolco, que forma parte de la plaza de las tres culturas.
Palacio de Kukulcan, en Chichen-itza, cultura Maya
Carita totonaca, Jalapa, Veracruz.
Templo de las inscripciones en Palenque, Chiapas, cultura Maya.
Cabeza colosal, cultura Olmeca.
Calzada de los muertos, Teotihuacan
La piedra del Sol y Quetzalcoatl.
Tambien nos muestra los trabajos en arcilla que se elaboraban.

 Esto es una forma mas de aprendizaje sobre las culturas antiguas y nos es de gran utilidad.

viernes, 2 de septiembre de 2011

Comentario sobre leyenda prehispanica "La Mujer Xtabay"

Esta leyenda prehispanica que es maya originaria de Yucatan me parecio interesante ya que nos menciona que los mayas de Yucatan son quienes mejor han conservado su idioma hasta la actualidad.
Nos relata que la mujer Xtabay, antes cuando aun vivia en el pueblo era conocida como Xkeban, es una mujer muy hermosa, inmensamente bella, tenia un corazon tan grande, como su belleza y bondad, que hacia socorrer a los humildes, amparar al necesitado, curar al enfermo y a recoger a los animales que eran abandonados por inutiles. Su gran alma la llevaba hasta poblados lejanos para auxiliar al enfermo y despojarse de las joyas que le eran regaladas por sus enamorados, para asi cubrir a los enfermos desheredados. Nunca murmuro, ni critico a nadie y con mucha humildad soportaba los insultos y humillaciones de la gente, ya que ella era vista como una prostituta, mujer mala o dada al amor ilicito.

En el pueblo tambien vivia una mujer joven llamada Utz-Colel, la cual, el pueblo la veia como mujer buena, decente, pura, limpia, virtuosa, recta y honesta, que no habia cometido ningun desliz ni el mînimo pecado amoroso; pero detras de sus vestiduras se dibujaba una piel dañina de las serpientes, era fria, orgullosa, dura de corazon y nunca jamas socorria al enfermo y sentia repugnancia por el pobre.

Al morir Xkeban, el pueblo se dio cuenta de que de la tumba salian olores de flores muy hermosos y decian que era porque asi seguiria provocando a los hombres.
Desde entonces crece la flor que actualmente se llama Xcabentun que es una flor tan humilde y bella, que se da en forma silvestre en las cercas  y caminos, entre las hojas buidas y tersas del agave. El jugo de esa flor embriaga muy agradablemente, como debio ser el amor embriagador y dulce que entregaba Xkeban.
Pero eso trae consecuencias ya que la bujer Xtabay suele agradar al viajero que por las noches se aventura en los caminos del Mayab, y es asi como al dia siguiente encuentran los cuerpos de los hombres rasguñados, con mordidas y el pecho abierto por uñas como garras.
Esto nos indica que todo lo que ocurrio en nuestro antepasado tiene consecuencias que van avanzando desde esos tiempos, que todo tiene una accion y consecuencia importante para las personas actuales, que nos enseñan como fue el pasado y es asi como se forma la flor y el gran olor que tienen.

La Mujer Xtabay

Los mayas de Yucatán son sin duda alguna, quienes mejor han conservado su idioma. Si no pueden interpretar, como tampoco lo ha hecho nadie en el mundo, sus complicados jeroglíficos, verdaderos retos ideográficos, si mantienen vivo su idioma lleno de firos y genuflexiones extraordinarios y en su fonética han sabido copiar el vuelo del murciélago dzib y lo que dice el pájaro Puhuy. Temen al temible Kahazbal y a los Aluxes, pequeños duendecillos del bosque y de las siembras, porque ellos, los mayas, no han permitido aún la corrupción idiomática que introdujeron los hispanos que vinieron a hacer confuso todo lo relativo al suelo que en mal día hollaron.
De esta forma se ha conservado intacta la hermosa leyenda, una de las más lindas, bellas leyendas yucatecas de las miles y miles que flotan como el perfume de la flor Xtabentún en el viento tibio de Mayab, o se esconden en las profundidades cavernosas de los cenotes de donde sale el agua fresca y clara y los cuentos que perduran en el alma yucateca. Esa leyenda es la que se refiere a la mujer Xtabay.
Bajo la luna del antiguo Mayapan, al socaire de los asombrosos templos de los itzaes, he oído repetida esta leyenda sin que nadie le quite o le aumente a su albedrío, sin que ninguno ose deformarla y así, como joya de milagrería se conserva para deleite de quien oye o de quien lee esta historia que como muchas no se ha borrado, no se borrará jamás, porque ha quedado inscrita en los libros antiguos y en las páginas sagradas del recuerdo Maya.
Dice pues la leyenda que la mujer tabay es la mujer hermosa, inmensamente bella que suele agradar al viajero que por las noches se aventura en los caminos del Mayab. Sentada al pie de la más frondosa ceiba del bosque, lo atraé con cánticos, con frases dulces de amor, lo seduce, lo embruja y cruelmente lo destruye.
Los cuerpos destrozados de esos incautos enamorados aparecen al día siguiente con las más horribles huellas de rasguños, de mordidas y con el pecho abierto por uñas como garras.
Muchos ladinos, gentes que desconocen el origen verdadero de la mujer Xtabay, han dicho que es hija del Ceibam que nace de sus torcidas y serpentinas raíces pero eso no es verdad, la auténtica tradición maya dice que la mujer Xtabay nace de una planta espinosa, punzadora y mala y si es que la Xtabay aparece junto a las ceibas, es porque este árbol es sagrado para los hijos de la tierra del faisán y del venado y muchas veces en cobijo y sombra, se acogen bajo sus ramas, confiados en la protección de tan bello y útil árbol.
Vivían en un cierto pueblo de la península yucateca dos mujeres siendo el nombre de una de ellas Xkeban o mejor decir su apodo ya que Xkeban quiere decir prostituta, mujer mala o dada al amor ilícito. Decían que la Xkeban estaba enferma de amor y de pasión y que todo su afán era prodigar su cuerpo y su belleza que eran prodigiosos, a cuanto mancebo se lo solicitaba. Su verdadero nombre era Xtabay.
Muy cerca de la casa que ocupaba esta bellísima mujer, habitaba en otra casa bien hecha, limpia y arreglada continuamente, la consentida del pueblo que llamaban Utz-Colel, que en la traducción hispana sería mujer buena, mujer decente y limpia. Erase esta mujer la Utz-Colel, virtuosa y recta, honesta a carta cabal y jamás había cometido ningun dezlis ni el mínimo pecado amoroso.
La Xtabay tenía un corazón tan grande, como su belleza y su bondad la hacía socorrer a los humildes, amparar al necesitado, curar al enfermo y recoger a los animales que abandonaban por inútiles. Su grandeza de alma la llevaba hasta poblados lejanos a donde llegaba para auxiliar al enfermo y se despojaba de las joyas que le daban sus enamorados y hasta de sus finas vestiduras para cubrir la desnudez de los desheredados.
Jamás levantaba la cabeza en son altivo, nunca murmuró ni criticó a nadie y con absoluta humildad soportaba los insultos y humillaciones de las gentes.
En cambio bajo las ropas de la Ut-Colel se dibujaba la piel dañina de las serpientes, era fría, orgullosa, dura de corazón y nunca jamás socorría al enfermo y sentía repugnancia por el pobre.
Y ocurrió que un día las gentes odiosas del pueblo no vieron salir de su casa a la Xkeban y supusieron que andaba por los pueblos ofreciendo su cuerpo y sus pasiones indignas. Se contentaron de poder descansar de su ignominiosa presencia, pero transcurrieron días y más días y de pronto por todo el pueblo se esparció un fino aroma de flores, un perfume delicado y exquisito que lo invadía todo. Nadie se explicaba de dónde emanaba tan precioso aroma y así, buscando, fueron a dar a la casa de la Xteban a la que hallaron muerta, abandonada, sola.
Más lo extraordinario era que si la Xkeban no estaba acompañada de personas, varios animales cuidaban de su cuerpo del que brotaba aquel perfume que envolvía al pueblo.
Entrada la Utz-Colel dijo que esa era una vil mentira, ya que de un cuerpo corrupto y vil como el de la Xkeban, no podía emanar sino podredumbre y pestilencia, más que si tal cosa era como todos los vecinos, decían, debía ser cosa de los malos espíritus, del dios del mal que así continuaba provocando a los hombres.
Agregó la Utz-Colel que si de mujer tan mala y perversa escapaba en tal caso ese perfume, cuando ella muriera el perfume que escaparía de su cuerpo sería mucho más aromático y exquisito.
Más por compasión, por lástima y por su deber social, un grupo de gentes del poblado fue a enterrar a la Xkeban y cuéntase que el día siguiente, su tumba estaba cubierta de flores aromáticas y hermosas, tan tapizado estaba el túmulo que parecía como si una cascada de olorosas florecillas hasta entonces desconocidas en el Mayab, hubiera caído del cielo. La tumba de la Xkeban duró todo el tiempo florecida y olorosa.
Poco después murió la Utz-Colel y a su entierro acudió todo el pueblo que siempre había ponderado sus virtudes, su honestidad, su recogimiento y cantando y gritando que habia muerto virgen y pura, la enterraron con muchos lloros y mucha pena.
Entonces recordaron lo que había dicho en vida acerca de que al morir, su cadáver debería exhalar un perfume mucho mejor que el de la Xkeban, pero para asombro de todas las gentes que la creían buena y recta, comprobaron que a poco de enterrada comenzó a escapar de la tierra floja, todavía, un hedor insoportable, el olor nausabundo a cadáver putrefacto. Toda la gente se retiró asombrada.
En su idioma maya dicen los viejos que aún cuentan la historia con todos los detalles que debió ocurrir en la leyenda, que hoy la florecilla que naciera en la tumba de la pecadora Xkeban, es la actual flor Xtabentún que es una florecilla tan humilde y bella, que se da en forma silvestre en las cercas y caminos, entre las hojas buidas y tersas del agave. El jugo de esa florecilla embriaga muy agradablemente, como debió ser el amor embriagador y dulce de la Xkeban.
Tzacam, que es el nombre del cactus erizado de espinas y de mal olor por ambas cosas, intocable, es la flor que nació sobre la tumba de la Utz-Colel, es la florecilla si bien hermosa sin aroma alguna y a veces de olor desagradable, como era el carácter y la falsa virtud de la Utz-Colel.
Esto es lo que ha dicho el maya y lo sigue repitiendo a través del tiempo, sin cambiarlo, sin ponerle ni quitarle, como deben conservarse las cosas nuestras, intactas, con las mismas palabras con que nacieron en el mito, en la leyenda, en el alma de quienes tan dulcemente han tejido estas historias.
No es pues la Xtabay, la mujer mal que destruye a los hombres después de atraerlos con engaños al pie de las frondosas ceibas, pero puede ser otro de esos malos espíritus que rondan por la selva al acecho del peregrino que cruza los caminos aún poblados de superstición y de leyenda.
Puede ser el ama errante de una de tantas vírgenes sacrificadas a la orilla del cenote sagrado, puede ser la vaporosa figura de una mujer que llora el engaño del amado.
Pero la Xtabay, jamás.
Esto dicen las mayas, esto han contado y seguirán contando los hombres de esa tierra en donde conservan el ritual de un relato y defienden sus costumbres de una intromisión que aniquilo su cultura.

domingo, 28 de agosto de 2011

ORIGEN DEL HOMBRE AMERICANO

De acuerdo a las diferentes teorías que hay acerca del origen del poblamiento en América, eh concluido que el origen del hombre ha sido desde nuestros ancestros ya que nosotros provenimos de los mamíferos ya que tenemos muchos parecidos a ellos.
Hoy en día hay muchas ideas contradictorias sobre el origen del hombre, pero yo creo que nosotros somos descendientes de los homosapiens, ya que conforme el homosapiens fue evolucionando, se fue adaptando a las diferentes floras y faunas, y que con el paso del tiempo comenzó a utilizar el fuego, a recolectar arroz, maíz, frijol, etc.; y también construyo diversas piezas para la cacería de animales para su sobrevivencia, después fue así como se empezaba la cacería en grupos de personas y con el tiempo la pesca, agricultura y ganadería; y también empezó a construir sus aldeas que con el tiempo llegarían a formar diversos pueblos primitivos.